La previa de la NBA II

#TodoBásquet

Luego de conocer a fondo a las franquicias del Oeste, y siguiendo con la antesala al arranque de una nueva temporada en la NBA, es hora de analizar a los equipos de la Conferencia Este

BROOKLYN NETS

Empezamos por los más nuevos. Bueno, quizás no tan nuevos. La palabra que mejor les cabe a los Nets es “reciclados”. Tras algunos años de puras frustraciones y malas decisiones en Nueva Jersey, apareció un tal Mikhail Prokhorov, magnate ruso, y el dinero llevó a la franquicia a Brooklyn, barrio neoyorquino conocido por su amor al básquet.

La duda para esta temporada era si lograrían retener a Deron Williams, base All Star. “Dwill” pedía a gritos que lo rodeen con talento y le concedieron el deseo. Llegó Joe Johnson, escolta francotirador, y renovaron contrato a Gerald Wallace, Brook López y Kris Humphries. Agreguen a estos nombres un banco de suplentes renovado y quizás tengan un contendiente fuerte en el Este.

La NBA hoy se debate entre dos puntos de vista. Por un lado están quienes creen que el nacimiento de la franquicia tiene una buena plantilla en que sostenerse, mientras que los detractores afirman que se pagó mucho por jugadores sobrevalorados. El tiempo determinará quién tiene razón, pero la emoción por ver una nueva franquicia sin dudas que llama mucho la atención.

NEW YORK KNICKS

Todos los ojos miran a la Gran Manzana. El Madison Square Garden es el escenario por excelencia de la NBA y siempre se está pendiente a qué sucede con los Knicks. Bueno, sucedió mucho en estos últimos meses. No sé si recuerdan a un tal Jeremy Lin. Su aparición sorpresiva en la liga, revolucionando todo en apenas 1 mes, no alcanzó para que NY le renueve la confianza.

Entonces todo quedó en manos de Carmelo Anthony, Amar’e Stoudemire y Tyson Chandler. Y en las de algunos veteranos más. Llegaron Jason Kidd, Raymond Felton, Marcus Camby, ¡¡¡Rasheed Wallace!!!, y hasta nuestro Pablo Prigioni, con sus 35 años. Los Knicks quieren experiencia y la compraron al por mayor.

Las aspiraciones del DT Woodson deben ser mayores a las del año pasado. Agarró el equipo en medio de una tormenta eléctrica y logró llevarlo al buen clima de los Playoffs. Cayó ante el campeón y dejó una imagen corta; falta trabajo para que sean considerados contendientes. Será sin dudas un interrogante el funcionamiento, recién se conocen muchos de los jugadores. Sigan la campaña de los Knicks, no se van a aburrir, se los aseguro.

BOSTON CELTICS

Boston hizo buenas movidas de nombres en el último verano. Sí, ustedes dirán que perdió a Ray Allen, quizás el mejor triplero de la historia, pero a mi entender creo que ayudará al vestuario más de lo que muchos piensan. En la última temporada quedó claro, este es el equipo de Rondo, Garnett y Pierce, de nadie más. Jason Terry y Courtney Lee serán grandes reemplazos para el tirador que se mudó a Miami.

Doc Rivers apostó por sostener su quinteto titular ideal. Hoy día Avery Bradley, la sorpresa del último año, ocupa el puesto de escolta. Lee y Terry como sustitutos es la envidia de muchos. Paul Pierce será el alero, Brandon Bass se mantiene como 4, mientras que Garnett seguirá haciendo de las suyas como centro.

Las claves para repetir el rendimiento del 2011-2012 (finales de conferencia) pasarán por la férrea defensa, distintivo de los Celtics, y algo más de vuelo en ofensiva. Rondo llevará las riendas, nadie puede discutir eso, de sus manos nacerán las ilusiones de Boston. Para muchos es un equipo viejo, al contrario, este año se ha rejuvenecido. Darán batalla, no lo duden.

PHILADELPHIA 76′ERS

Esta franquicia es el ejemplo de cómo un acuerdo entre cuatro equipos puede cambiar el futuro inmediato. “Philly” se metió en el traspaso entre los Lakers y Magic por Dwight Howard y, logró quedarse con Andrew Bynum entregando a Iguodala a los Nuggets. Así dio un giro de 360 grados y se convirtió en un equipo alto y fuerte, con chances de ser Top 3 en la conferencia.

Pero no todo es tan fácil. Sabemos de la personalidad difícil de manejar de Bynum. Los berrinches en los Lakers están muy frescos en la memoria y, pese a que el centro ahora tiene lo que quiere, ser el líder, deberá demostrarlo con buen básquet en la cancha y cabeza fría fuera de ella. No puede hacer el papel de caprichoso otra vez.

Junto a Jrue Holiday y Evan Turner, Bynum será parte del “tridente” del equipo dirigido por Doug Collins. Si estas tres piezas funcionan y el hombre grande sabe distribuir el balón desde el poste bajo, los Sixers contarán con chances de tirar muchos lanzamientos abiertos. Los optimistas ven resultado a corto plazo, en mi opinión esta franquicia dio un paso al futuro, y ahí es donde cosechará sus frutos.

TORONTO RAPTORS

La temporada pasada la franquicia canadiense dejó una imagen irregular. Pese a contar con un plantel sin estrellas había logrado buenos momentos de básquet, hasta que las lesiones le jugaron una mala pasada. Andrea Bargnani, el pivot italiano, fue clave en el comienzo del año, pero se lesionó y dejó al equipo sin su mejor arma en ofensiva.

Entonces este año decidieron ir por Kyle Lowry, base proveniente de Houston, que también tuvo un 2011-2012 en gran nivel. Su mala relación con el entrenador de los Rockets lo llevó a aceptar la oferta de Toronto para cargar con las riendas del equipo. Será el titular, relegando a José Calderón, el conductor español.

Además los Raptors ficharon a Terrence Ross, el número 8 en el draft, y a Landry Fields, de buena temporada en los Knicks. Junto a DeMar DeRozan y la llegada del lituano Valanciunas al equipo, se formó un buen núcleo, un plantel parejo y con alternativas. No esperen que lleguen lejos, y no por su falta de calidad, sino por lo duro que se ha puesto el Este, con los Knicks, Heat, Pacers, Bulls, Sixers y Celtics muy por delante de ellos.

CHICAGO BULLS

Este año será extraño para los Toros de la “Ciudad del viento”. No podrán contar con Derrick Rose hasta marzo del 2013 y eso se sentirá en los primeros meses de competencia. Además en el verano la dirigencia hizo algunos movimientos en el banco, precisamente la parte del equipo que mejor funcionó la temporada pasada.

Se fueron Korver, Watson, Brewer, Lucas y Asik, toda la banca. Llegaron Belinelli, Hinrich, Mohammed, Radmanovic y Robinson. Creo que han dado un paso atrás en este aspecto. Los jugadores que dijeron adiós estaban probados como buenos y rendidores reservas, ahora habrá que trabajar para convertir a los nuevos en eso mismo.

En el medio esta temporada será clave para Tom Thibodeau, ya que está en año de negociación de contrato, lo que siempre es un problema puertas adentro. Esperen entonces un equipo distinto al del pasado (no será el mejor récord de la Liga). Llegará a los Playoffs y con la esperanza de un Rose en mejores condiciones quizás pueda dar el golpe, pero para eso necesitará más ayuda de Boozer, Noah y Deng.

INDIANA PACERS

Hubo un gran cambio en Indiana en este parate. Y quizás haya sido tan importante que pueda definir su futuro en la temporada. Se fue Darren Collison, su base titular y hombre clave para manejar la ofensiva. La decisión de la gerencia fue darle más lugar para brillar a George Hill. El problema está en que Collison se presentaba como un conductor más completo, cosa que el ex Spurs no es.

Más allá de este movimiento, poco pasó en la franquicia. Mantienen a Roy Hibbert, pivot que mostró tener mucho futuro en el último año, David West, veteano de mil batallas, Danny Granger, irregular pero clave para defender a jugadores como LeBron James, y a Paul George, uno de los escoltas más explosivos de la liga. No está nada mal.

Es sin dudas uno de los mejores equipos del Este y este año deberá demostrar si tienen chances de eliminar a Miami en un hipotético cruce en Playoffs. Tienen la altura, tienen la fuerza y tienen también una gran defensa, pero repito: sin un base que juegue para el equipo y no para su lucimiento, será una incógnita qué nivel mostrarán en ofensiva.

MILWAUKEE BUCKS

Pegar el volantazo. De eso se trató la última temporada de los Bucks. Se les acabó la paciencia con las lesiones de Andrew Bogut y decidieron mandarlo a Golden State en lugar de Monta Ellis. Importante cambio de rumbo: pasaron de ser un equipo focalizado en su defensa, a ser liderados por Ellis y Brandon Jennings, dos jugadores casi idénticos en sus pros y contras.

Pero aún no dije que no les vaya a funcionar. Ha pasado en muchas ocasiones en que dos bases/escoltas parecidos conseguen convivir dentro del mismo equipo. Habrá que esperar para ver cuál de los dos sacrifica algo de protagonismo en post de ayudar a Milwaukee. Será cuestión de egos, y eso en la NBA puede terminar muy mal.

Hubo movimientos en la banca. Se fueron Carlos Delfino, Jon Leuer y Shaun Livingston, llegaron Samuel Dalembert, Joel Przybilla y el novato John Henson, mucha altura y fuerza. También le renovaron a su mejor jugador el año pasado, Ersan Ilyasova. Este proceso servirá de apuesta para los Bucks, pero veo en el futuro otro volantazo si es que la relación Jennings-Ellis no es fructuosa. ¿Playoffs? Poquísimas chances.

CLEVELAND CAVALIERS

¿Cómo reconstruir una franquicia que hace tan sólo dos años contaba con el mejor jugador de la liga, LeBron James? Hay dos caminos: se puede contratar veteranos para tratar de ganar hoy, o se acumulan opciones de draft para hacer un equipo jóven y que intente triunfar mañana. Los Cavs optaron por la segunda.

Tras el drama de James consiguieron a Kyrie Irving y Tristan Thompson. El base tiene el cartel de futuro All Star. Demostró en su temporada de rookie que puede ser el máximo anotador y figura del equipo. Thompson se quedó en ilusiones y concretó poco. No hay que dejar pasar la salida de Jaimison, alero experimentado que aportaba buenos puntos y rebotes. Será difícil reemplazarlo.

Cleveland entonces este año decidió volver a apoyarse en las elecciones del draft. Se quedaron con Dion Waiters, un escolta explosivo, con campo para mejorar y buen partenaire para Irving. Además sumaron a Tyler Zeller, un pivot prometedor. Sumados a algunas piezas poco importantes intentarán dar un paso arriba respecto de la temporada pasada. En definitiva, seguir construyendo a futuro.

DETROIT PISTONS

Los novatos parecen ser la respuesta finalmente en Detroit. Después de un par de temporadas bancando salarios altos de jugadores que no los valen (Ben Gordon, Charlie Villanueva) el General Manager Joe Dumars se decidió a tirar el lastre y apostar al futuro. Léase Greg Monroe, un pivot que pasa desapercibido para la mayoría.

Los Pistons quieren construir alrededor del atlético y habilidoso centro. En el último año anotó 15 puntos y bajó casi casi 10 rebotes por partido. Y tiene apenas 22 años. Pero no todo cae sobre sus hombros. Además draftearon al pivot Andre Drummond, una apuesta fuerte, pero arriesgada.

Junto a la llegada de Corey Maggette, que aporta defensa y un digno tiro externo, Stuckey y Knight, los bases, intentarán mejorar el registro de la temporada pasada (25 victorias y 41 derrotas) No esperen grandes actuaciones, es más quizás no vean un sólo partido de Detroit en el año. Ellos mientras tanto apuestan a la juventud.

MIAMI HEAT

Al campeón le gusta correr. Y volar. Es lo que tiene en mente Spoelstra, el DT de Miami. Quiere un equipo más atlético y más rápido que el del año pasado. Y lo piensa lograr con cuatro jugadores de más de 30 años. Esa es la principal novedad del Heat: se ha convertido en una rotación “vieja”.

Claro, ustedes pensarán que con Dwyane Wade, LeBron James y Chris Bosh debería alcanzar para llegar a una nueva final de la NBA. En la franquicia creían que no y fueron a buscar al mejor tirador de todos los tiempos, Ray Allen. Pero el ex Boston llegó con problemas en los tobillos. También fueron por Rashard Lewis. Pero el alero va de lesión en lesión hace tres años. Sumados a Mike Miller, inestable físicamente, y Shane Battier, ya llegó a los 34, no son la fuente de la juventud.

La velocidad a la que juega Miami lo ha convertido en el mejor de la liga. James y Wade vuelan por el parqué de cualquier equipo y lo hacen con su propia versión del showtime. Y todo sin pivot, gran detalle estratégico. Este año intentarán convertir esta buena racha en un comienzo de dinastía. Es número puesto para la final.

ORLANDO MAGIC

El otro equipo de la Florida vive un presente absolutamente distinto al de su vecino, el Heat. Después de pasar por el drama de Howard y finalmente dárselo en bandeja a los Lakers por algunas opciones de draft, el escolta Aaron Afflalo, el mexicano Gustavo Ayon y Al Harrington, Orlando comenzó su nuevo camino. Quedará en cada uno juzgar si será suficiente para lo que se viene. Y se viene lo peor.

Básicamente, quieren perder. Sí, suena mal, pero es como hoy día funciona la NBA. Una franquicia se revaloriza obteniendo juventud desde el draft y para lograr eso tenés que estar en el fondo de la tabla. Así al menos lo han hecho Oklahoma City Thunder, New Orleans Hornets y Cleveland Cavaliers.

Entonces, ¿qué esperar de esta temporada del Magic? Poco y nada. Veremos un técnico debutante, Jacque Vaughn, un grupo de juveniles con futuro (Moe Harkless y Andrew Nicholson), y muchos cambios y derrotas. No se sorprendan si se van Glen Davis, Hedo Turkoglu y JJ Redick y llegan más opciones de draft. Va a ser un año muy largo para los mágicos de la Florida.

CHARLOTTE BOBCATS

Orlando y esta franquicia seguramente batallarán por el peor récord de la temporada. De hecho, los Bobcats ya han roto el récord de peor porcentaje de victorias en la historia del deporte norteamericano. Si, leyeron bien, el equipo comandado gerencialmente por Michael Jordan, es el peor de todos. Pero quizás 2012 no sea tan malo como todos piensan.

Charlotte se encuentra en la segunda fase de la reconstrucción (Orlando, nuestro caso anterior, recién está en la etapa embrionaria). Los Cats ya seleccionaron su primer arma para esta tarea: Kemba Walker llegó el año pasado y demostró que tiene habilidades. Ahora se suma Michael Kidd-Gilchrist, el número dos del draft, un alero con mucha capacidad atlética, pero también algunos interrogantes.

Lo único que podemos esperar en el corto plazo para los Bobcats es que les salgan bien las jóvenes apuestas. Tendrán que mejorar su ataque. Y su defensa. Y su mentalidad. Y su porcentaje de triunfos. En fin, tendrán que mejorar mucho mientras se esfuerzan por seguir siendo malos y así adquirir más novatos con futuro.

ATLANTA HAWKS

Acá las cosas están cambiando también. Con la llegada de Danny Ferry, nuevo manager, la idea de Atlanta es empezar con el proceso de reconstrucción. Para eso dejaron ir a Joe Johnson a Brooklyn y apostaron al tridente Teague-Smith-Horford para conseguir otro lugar en los Playoffs.

De todas formas este equipo no será sorpresa. Sigue en una especie de situación empantanada, donde lo único que ha logrado hace algunas temporadas es ser una molestia entre el cuarto y octavo puesto del Este, sin ningún tipo de aspiración al título. Quizás este año sea peor que el anterior, pero es el que marcará qué tanto puede crecer la franquicia.

Llegaron algunas caras nuevas que podrán tener buen lugar en la rotación. Devin Harris ayudará a Teague en la conducción, Lou Williams tendrá el puesto de escolta y podrá tirar todo lo que quiera y para reemplazarlo estará Kyle Korver, uno de los mejores francotiradores de la Liga. Es una buena plantilla, equilibrada, pero que está desesperada por conseguir resultados y eso puede ser contraproducente.

WASHINGTON WIZARDS

Año clave para este equipo y para John Wall, el número uno del draft de hace dos temporadas. Es el momento en el que tiene que dar un paso al frente para cambiar y convertir a la franquicia en un rival a tener en cuenta. Pero todo dependerá de Wall, y ya empezó con el pie izquierdo ya que se perderá el primer mes de competencia por lesión.

Los Wizards han hecho algunas movidas en el mercado de pases que hacen ilusionar a sus seguidores. La temporada pasada ya habían abrochado a Nené, el pivot brasileño, y a Emeka Okafor, defensor duro en la pintura. En este período de descanso seleccionaron en el draft a Bradley Beal, un novato que esperan sea el compañero ideal de Wall.

La temporada pasada fue para el olvido. No lograron nada de lo que se habían puesto como meta al comienzo y encima cambiaron de rumbo en el medio canjeando a Javale McGee para ordenar el vestuario. Quizás este año sean un poco mejores, pero para que esto suceda repito el punto anterior: John Wall tiene que vestirse de héroe.

Así terminar mi breve análisis de cada una de las fraquicias de la liga. Faltan horas para el comienzo de la temporada y creo que este pantallazo servirá para aquellos que quieren conocer de antemano cada equipo.