Esperaba una fiesta. Sinceramente esperaba disfrutar de la noche. El máximo ídolo volvía a la Bombonera y con él se suponía una victoria ante el peor equipo de Primera, un casi descendido Unión de Santa Fe.
JR volvió tras 8 meses y jugó bien. No se vio un tipo falto de juego y se asoció perfectamente con Pichi Erbes y Erviti (los tres mejores jugadores en cancha). Román intentó, hizo lo que pudo. Ojo, no estoy diciendo que tiene la culpa, con los compañeros que tiene que puede hacer…