El Batman de los años sesenta fue una parodia de sí mismo, eliminando todo caracter trágico o gótico que el personaje pudiese cargar. En su lugar, pusieron al panzón de Adam West en el rol del superheroe y a un despistado Robin haciendo de su elemental y querido Watson. La canción de la serie se convirtió en un clásico. Compuesta por Neal Hefti, mezcla elementos de la música surf con tintes detectivescos, géneros populares en ese entonces.
Diversas bandas de rock, durante mucho tiempo, utilizaron el tema en sus grabaciones. No solamente la utilizaron, entre broma y tributo para sus recitales en vivo, sino que la llegaron a registrar en estudio.