Cuando los introdujeron en el mercado, la preocupación era mantener el mínimo de nicotina y sabor indispensable para que los fumadores no lo detestaran. Light, milds, suaves, livianos, blue, medios, ultra, extra, en inglés, en español… uno a uno fueron irrumpiendo en la escena desde inicios de los `70. El nombre variaba pero el mensaje era el mismo: son cigarrillos (más) sanos.