Elegir obstetra se puede parecer bastante a un reality televisivo en el que junto con nuestros maridos somos los jurados. Frases como “Te falto actitud”, “Te note desconcentrado” o “Esperaba un mejor desempeño” que podrías escuchar en boca de Pachano en Showmatch aplican perfectamente a lo que pensamos cuando salimos de la primer consulta en la que conocemos a quien podría ser nuestro médico.
Mientras buscamos todos opinan: “¿Todavía no te decidiste?“, “Te conviene que sea mujer”, “ya atendió los 3 partos de mi cuñada”, “busca a alguien que priorice los partos naturales”, “Que sea un médico que no te de vergüenza hacerle mil preguntas”, “Que raro que no te gusto Montoto, si está re de moda”. Imposible no terminar mareada, y no tiene que ver con las nauseas del primer trimestre. Continuar leyendo