Alguna vez una película dejó esta frase grabada en el aire: “Nunca he tenido el corazón tan rojo.“
Fue un enero de cuadernos que cobran vida y poemas que florecen de las yemas de los dedos, de corazones rojos, de decir: escribir es pintar con palabras. Fue un enero de decidir soltar un cuaderno al azar, y soltarlo es otra forma de soltar los mapas…