El actor, director y dramaturgo se mostró enojado por no poder concretar su deseo: “A los que están en contra, que vayan adoptarlos ellos”. Además salió a ‘bancar’ a sus colegas que se pronunciaron en contra de la inseguridad: “Criticar en nuestra sociedad pareciera que es ser malo”
Pepe Cibrián decidió dialogar acerca de sus proyectos, pero optó hacer un alto y profundizar en un tema tan importante como la adopción en matrimonios del mismo sexo y “bancar” a sus colegas que se pronunciaron en contra de la inseguridad en los medios.
El actor expresó su preocupación por la adopción, trámite que inició hace un tiempo: “Me parece aberrante que no se puedan adoptar chicos. Yo entiendo que lo ideal es un papá y una mamá, porque yo vengo de un papá y de una mamá, pero lo que yo le propongo a la gente que está en contra, que vayan adoptarlos ellos, los legisladores, los ciudadanos en general“.
“Si ellos no los adoptan, cuando nosotros vayamos adoptar no nos digan que no, porque están con un papá y una mamá buenos y no malos porque existen muchos. Lo leo seguido en los diarios”, agregó.
A su vez, Pepe reflexionó: “Los que están en contra y no hacen nada más que estar en contra, no ayudan. Ahora si estas en contra de que la calle está sucia y dejas que se junte mierda, y más mierda, no estás haciendo nada, pero ahora si limpias la calle, estás accionando. Todo el mundo tiene derecho en estar desacuerdo, pero hay que hacer. Al hacer uno trasgrede. Todo el que hace es un poquito peligroso. Tener éxitos genera más conflictos que fracasos”.
También aprovechó para recordar cuando en 2010 recitó “Marica” en el Senado a favor de la ley de igualdad: “Había estado en un almuerzo de Mirtha Legrand, porque la editorial me llevó a promocionar mi libro al programa y ese día tuve una discusión con la legisladora Hotton, sobre la adopción de los niños”.
“En la discusión le digo: ¿Qué preferís que los maten o los forniquen y los tiren o que yo les pueda dar amor? Es una buena mujer rubia, que culpa tiene, pero bueno. El tema quedó ahí. Al lado mío había una Senadora, que yo no conocía, esa misma noche me mandó un correo invitándome para realizar al otro día la primera exposición a favor de la ley. Lo pensé mucho, lo hable con Santiago (su pareja). Me causan mucho respeto las Instituciones. Decidí que lo iba hacer”, detalló.
Cibrián contó porque eligió interpretar unos párrafos de su monólogo: “A través de mi autor, un hombre de teatro lo que soy, poder exponer, exactamente lo que siento. No es una apología a la sexualidad. Es una metáfora. Primero hablé, luego lo recité, y cuando lo vi en la tele muchos de los legisladores se iban poniendo blancos. Nunca entendí porque ella me ha invitado. Ese discurso fue muy fuerte que hice muchos reportajes a raíz de eso. Generé algo que es no confrontar, tratar de hacer entender que en la homosexualidad hay amor, hay permanencia, hay cuidados, hay muerte. Sin la ley estaban totalmente desprotegidos. Tengo amigos de más de treinta años que cuando cuando uno de los dos fallecía, la familia no dejaba entrar al otro, y eso me parece aberrante”.
El dramaturgo se refirió a la aparición de Ivo Cutzarida y a los demás actores que opinaron de la inseguridad en nuestro país: “No veo televisión. No la veo pero me parece muy bien que puedan criticar. En EEUU los actores critican la guerra de Vietnam, de Afganistán, toman actitudes y posturas. Lo que pasa que todo eso en la vida, en esas sociedades no es castigable por estar a favor o en contra de un demócrata o un republicano, y pareciera que en nuestra sociedad implica ser malo. Ahora si esto implica por estar a favor ciertas prebendas que no tienen otros, ahí no me parece ético”.
En una charla totalmente distendida, el creador de los musicales se animó a contar como nació su polémico monólogo: “No me acuerdo la fecha cuando lo escribí, ni me acuerdo en que año falleció mi mamá. Simplemente tenía ganas de escribir sobre Federico Lorca. Cuando yo era chico venían grandes poetas a mi casa, eramos muy amigos con él. Yo escuchaba ese lenguaje. Era muy rico escucharlos. Como leí bastante sus obras, se me ocurrió escribir una suerte de fantasia, se sabe que lo mataron pero no se sabe exactamente en que lugar”.
“Su familia no permitió que se investigara. Fantasee con su asesino, donde aparece su padre, su madre. Él aparece vivo y muerto. Es muy metafórico. La guarde. Nunca la pensé hacer yo. Siempre a mis alumnos le leo las obras, como las leo yo hago todos los personajes, me dicen que haga todos. Un alumno, que tenía un puesto importante en la Facultad de Medicina, y el decano me invitó a leer a beneficio de hospitales, que fue interesante hacerlo en una puesta más teatral. Gané premios, lo hice en Miami, Cuba, Formosa, en su pueblo, y fue toda una experiencia. Ahora lo hago en tanto en tanto y no mucho, porque no es fácil. Cuando lo hago lo disfruto”, subrayó.
Además se animó a enfatizar lo importante que fue interpretar a Bernardette en Priscilla, lo que significó un renacer en su carrera y lo que lo llevó su primer proyecto cinematográfico: “En marzo haré mi primera película que dirigirá Marcos Carnevale y seré el protagonista junto a Graciela Borges. El elenco estará integrado por Norma Aleandro, Oscar Martínez, Ana Picchio, Natalia Oreiro, entre otros. Una cantidad de figuras. Todo fue por Priscilla porque Marcos me fue a ver y todo surgió por ese musical. Adrián Suar también me fue a ver y me propuso al día siguiente para hacer televisión, no tengo tantas fuerzas, porque es muy delicado en horarios. Fue muy grato ser convocado como actor. Fue un renacer en mi carrera“.
“Tiene que ver con salir a golpear las puertas porque yo me ofrecí a ser Bernardette, yo me ofrecí, a mí no me llamaron. Cuando lo hice todos decían,que horror, cómo te vas a dirigir, quién lo va a dirigir. Como si fuese un monstruo. Sin embargo Pepe se dejó dirigir, lo disfruté mucho. Jamás pensé que iba a pasar eso. Me encantó ese personaje porque me conmovió mucho. Trabajamos otro tipo de Bernardette, ese personaje es y existe, se llama Carlota, vive en Australia”, enfatizó.
Con respecto a sí el éxito lo mareo en algún momento de su carrera, fue contundente: “Vengo de siete generaciones de lucha de teatro. El éxito nunca me mareo. No me marea nada. Solo que Drácula me cambió la vida. Nunca me creo más porque yo soy más. Creérmelo será paradójico“.
El director adelantó que Drácula, el musical que le cambió la vida, tal como lo definió él mismo, se reestrenará en 2016, como cada cinco años y estará en cartel tres meses y luego hará una gira. Por último recordó a su padre con la obra que interpretará Susana Giménez próximamente: “Mi padre la dirigió cuando empezó su carrera, y esta obra que hará fue dirigida por él. Un éxito que duró tres años. A Susana la dirigiría encantado pero no tengo deseo ni no deseo. La quiero mucho, seguramente va a estar brillante, es una comedia en donde mi mamá hizo un trabajo excepcional“.
