Confieso mi nostalgia por una de las sociedades con menor grado de moralina que conocí. Una en la cual, en palabras de mi amigo G.-L., los escándalos de dinero eran considerados mucho más graves que los de faldas.
Con esta policía no se juega….
Entre las muchas cosas que pueden llamar la atención de quien recorre las calles de París está el impresionante despliegue de los llamados CRS, una fuerza de orden y antimotines con la cual es frecuente toparse en ocasión de manifestaciones y otros acontecimientos públicos.
Pan y chocolate
Este es un post para gourmets o, más bien, golosos. No voy a repasar la gastronomía francesa –esa será otra nota- sino mencionar algunos gustos que uno se puede dar, mientras pasea por París (ver cómo recorrer la ciudad en un día), haciendo simplemente un alto en un quiosco (café tabac), en una panadería (boulangerie), en un bar o en puestos callejeros; y otras cosas ricas que se pueden comprar en el supermercado o chez l’arabe (equivalente a nuestros almacenes “chinos”). Que lo disfruten.
Ciencia y fe en la Iglesia del Código Da Vinci
Pese a su ubicación bastante central, a pocos metros del Boulevard Saint-Germain des Prés, en el corazón del muy chic distrito 6º, Saint Sulpice no está entre las más afamadas iglesias de la capital francesa. Sin embargo, encierra varios tesoros y curiosidades que vale la pena conocer.
La plaza más linda de París
Es también la segunda en antigüedad. Fue inaugurada en 1612. Su construcción había sido ordenada por un Rey –el mejor que haya tenido Francia, dicen muchos- que no la llegó a disfrutar porque murió apuñalado en una calle de París en 1610. Sí lo hizo su viuda, probable instigadora del regicidio. Inexplicablemente, esta plaza no tiene tanto renombre turístico como otros sitios de la capital francesa. Sin embargo, le sobran encanto, originalidad y elegancia.
Sólo en Francia podía pasar esto…
Un señor con cara de maestro hace dictados por televisión y esa prueba de ortografía se convierte en un éxito impensado que durará 19 años y llegará a convocar hasta dos millones de espectadores…
París y su isla “maldita”
La concentración de historia por metro cuadrado debe ser una de las más altas en estas 17 hectáreas, en el corazón de París. Alberga monumentos medievales únicos y dos de las más grandes bellezas de Francia: la catedral de Notre Dame y la Sainte Chapelle. Pero también fue escenario de momentos impactantes de la historia de Francia. Personalmente elijo uno, gracias a un libro fascinante. Nadie que lo haya leído, se resiste luego a la tentación de ir a ese extremo de la isla de la Cité desde el cual el último jefe templario lanzó al rey de Francia una maldición que no tardaría en cumplirse…
El francés más famoso
Alain Delon es para los franceses lo que para nosotros Maradona (y ahora también Messi): el compatriota al que, de Tokio a Los Ángeles, de Buenos Aires a Moscú, todo el mundo conoce. Y, sin embargo, el “James Dean francés” no goza en su patria del mismo reconocimiento que tiene en el exterior. Tal vez porque nadie es profeta en su tierra. O quizá porque a Delon jamás le interesó mostrarse políticamente correcto…
Ver París en cuatro películas
La Ciudad Luz ha sido locación de tantos films, que sería imposible enumerarlos a todos. Pero algunos realizadores la mostraron de un modo original o eligieron barrios menos clásicos o poco frecuentados de la capital francesa. Para descubrir París –si no lo conocen ya- o para recordarlo, les propongo estas cuatro películas. Hay miles, reitero, pero éstas tienen el valor agregado de ser todas muy buenas.
El nombre de la Argentina, ¿vino de Francia?
Sí, ya sé. Me van a decir que no, que fue el clérigo español –extremeño- Martín del Barco Centenera el primero en usarlo (en el año 1602) como título de un poema en el que describía la región del Plata. Es así. Pero, ¿de dónde lo sacó? ¿Sabían que una importantísima ciudad francesa se llamó Argentina (sic) durante la Antigüedad y temprana Edad Media? ¿Y que casi perdemos el nombre porque en 1853 Sarmiento pidió cambiarlo por considerarlo legado de la odiosa tiranía rosista? Avatares de un adjetivo culto que venció a la prosa constitucional y a los disensos civiles para transformarnos quizá en el único país de la tierra cuyo nombre viene de la poesía…