La permanencia está intrínsecamente ligada a una sola cosa: el valor. Si una función o una persona entregan valor a su organización, no hay duda de que la compañía quiere que siga siendo así. Los Chief Marketing Officers han tenido momentos difíciles manteniendo su ocupación en la última década, pero ahora son los únicos capaces de ofrecer un valor sin precedentes a sus organizaciones. Y su permanencia está en aumento.
Cada año, un estudio de Spencer Stuart revela cambios en el promedio de permanencia de los CMO. En los últimos 5 años, saltó desde un mínimo insignificante de 23 meses en 2006 a unos respetables 43 meses en 2011. Los CMO todavía no duran tanto como otros ejecutivos C-suite (los CEOs tienen una antigüedad media de 8,4 años, y los CFOs más de 10 años), pero la tendencia es positiva y parece ser duradera.
El aumento en la permanencia de los CMO implica tanto que los CMOs están optando por quedarse, como que los CEOs están deseando que se queden. Los CEOs en realidad están comprendiendo mejor el valor del CMO, y se están dando cuenta de que el marketing no es un juego corto, como las ventas. Parecen haberse quedado en la observación de hace décadas de Peter Drucker, “Debido a que el propósito de la empresa es crear un cliente, la empresa tiene dos – y sólo dos – funciones básicas: marketing e innovación. El marketing y la innovación producen resultados, todo lo demás son costos. El marketing es la función distintiva y única de la empresa”.
Aquí están las 10 razones principales por las que los CMO mantienen sus puestos de trabajo: