El beneficio de la duda

Yo creo que es bueno dudar.

Hay que dudar.

Bueno, en realidad no es que haya que dudar. O haya que hacer tal o cual cosa. Eso por supuesto que no. A nadie se le puede decir qué es lo que tiene que hacer.

dudar2Nadie mejor que uno para descubrirlo. Para darse cuenta qué es lo que decide hacer. O lo que prefiere evitar.

Etcétera.

Pero pasa también que a veces uno se compenetra y comparte la convicción.

Dice, hay que dudar.

Y luego se da cuenta de lo fallido que estuvo. El problema que le ocasionó la convicción desmedida y el ímpetu abusivo. Movilizado por buenas intenciones aunque tenga un espíritu errático.

Pero ocurre que en la duda está la posibilidad de pensar. De evaluar alternativas y adentrarse en la información, para elucidar caminos y tomar decisiones convenientes. Continuar leyendo

Zánganos!

Estábamos en un asado cuando tuve la suerte de conocer a Enrico.

En verdad lo conocía de antes, pero en sus aspectos más superficiales. Esta vez Enrico estaba frente a mí y sin querer iba a presentarse con cuerpo y alma.

Así lo hizo de repente, en el momento menos pensado. Fue cuando abrió la boca, en uno de los tantos silencios.

zángano- Son zánganos –dijo. Cualquiera que no se levanta a las siete de la mañana es un zángano.

Tomado por su certeza, Enrico pareció endiablarse y determinar para todos las precisiones del mundo.

- No digan que no. Son zánganos.

Juan Alberto estaba a su lado. Miró con desconfianza y balbuceó.

- Yo, aunque sea dormido, a las siete y media voy en la camioneta a la oficina –dijo disciplinado. Continuar leyendo

El precio de la libertad

Debe ser de la escuela que uno queda obsesionado y dispuesto a liberarse, pagando los precios que haya que pagar.

A mí me tocó conocer a Martita, que nos ponía en fila. Nos demandaba cantar Aurora y permanecer en silencio sin chistar.

fotojuanpost

Yo permanecía en la fila balbuceando las estrofas. Como un alumno disciplinado incapaz de cometer cualquier disrupción.

Martita era chiquita pero brava y sabía poner orden a las numerosas filas del colegio que cantaban en el Nacional de Pringles, de lunes a viernes a las siete cuarenta y cinco de la mañana.

Solo algún rebelde, indisciplinado y facineroso podría tener la valentía de alterar el orden. Cosa que nunca ocurría. Porque todos con las lagañas en los ojos permanecíamos disciplinados cumpliendo con nuestro deber.

Pero no creo que haya sido la estricta de Martita responsable de mi intención libertaria. Hacer semejante aseveración sería distorsionar la realidad y dotar de una jerarquía abusiva a cierta circunstancia menor.

Han sido otras cosas. Tal vez cada uno de los disciplinamientos a los que fuimos sometidos desde chicos, los causantes de la búsqueda de la libertad. El libre albedrío. Y hacer lo que a uno se le antoja. Continuar leyendo

¿Somos todos Peronistas?

Me quedó cierta reminiscencia de la infancia. O de la temprana edad.

Aunque no sé bien cuándo comienza la temprana edad.

festejo2Lo que sí tengo claro es que fui Peronista. Bien Peronista.

Desde chico, nomás.

Todavía recuerdo caminar en las calles de mi pueblo un día festivo. Cuando el Peronismo se impuso en las elecciones. Y nuestro líder iba a hacerse cargo de la Municipalidad.

Por fin.

Ahí estábamos con Chochito, mi amigo de la infancia. Y tantos otros.

Paso, paso a paso. Se viene el Peronazo.

Decíamos por las calles de Pringles, en las columnas de vecinos que salimos a festejar el triunfo.

Y caminábamos y gritábamos. Paso, paso a paso… Continuar leyendo

El riesgo de exponerse

Todo tiene su precio.

Exponerse tiene el suyo.

Por eso para mucha gente es mejor preservarse.

Quedarse entre bambalinas.

opinar4Es una decisión que eligen o elegimos en ciertas ocasiones, porque se trata de un lugar seguro. Nada puede pasarnos.

En cambio, exponerse.

Asomar la cabeza.

Cuidado.

Puede ser peligroso, sobre todo si están las fieras merodeando.

Esperando. Continuar leyendo

El poder es de la gente

Los políticos no han venido a salvarnos a todos.

Tampoco han venido a salvarse a ellos mismos.

Cuando acceden a cargos, son representantes legítimos de la soberanía popular.

votar

Y deben obrar en consecuencia.

Por eso tan importante como escuchar los resultados de las urnas, es responder en el accionar cotidiano con políticas que atiendan a los reclamos de los electores.

La inflación, la inseguridad…

Mirar para otro lado, es una técnica fallida que la soberanía popular hace notar cuando se expresa.

La sociedad suele creer en los políticos honestos, trabajadores y capaces. Pero suele elegir a quienes la escuchan. Y se muestran proclives a dar respuesta a sus demandas. Continuar leyendo

¿La culpa es del otro?

noescucharLa escuché con atención.

Estaba convencida.

El culpable era el otro, que había decidido tomar ciertos comportamientos desalineados con su expectativa.

Le pregunté por qué estaba tan convencida.

Porque no podía ser. Me dijo.

No estaba bien lo que el otro hacía. Y la vida se estaba haciendo desprolija para la reputación.

Intentaba hacerle algunas preguntas para ver si estaba dispuesta a repensar su percepción. Su definición de la realidad.

Pero era inútil. No tenía intención de explorar los motivos del otro. Encontrar las causas y comprenderlas.

El apego a sus expectativas era más fuerte que cualquier argumentación. O ánimo por descubrir la razonabilidad de las cosas.

La comprendo. Es más fácil cerrarnos a nuestras certezas, que abrirnos a las verdades de los demás.

Sin escuchar, todo se volvió previsible para ella.

El mundo seguía siendo como lo veía.

Y la culpa era del otro.

 

*Que tengan un excelente día. Hasta la próxima!

Escritos de la Vida - Juan Valentini

 

*Juan Valentini es autor de “Escritos de la Vida”. Los contenidos de este Blog no forman parte del libro. También es autor del libro de superación personal “El Campeón: filosofía práctica para ganar en el juego e imponerse en la vida”.

 

¿Vivimos con miedos?

El miedo existe para preservarnos. Y cada uno sabrá la relación que establece con él.

Es como una alarma que nos dice, cuidado. Atención.

Estás por ingresar a zona de riesgo.

vivirconmiedo

Es extraño pero el miedo habla sin palabras. Se presenta ante nosotros como una sensación que no podemos evitar. Y nos advierte con claridad como si fuera un hecho noticioso.

En un momento determinado, parecería que el mundo se detiene y de pronto irrumpe esa voz interna.

Cuidado.

Dice.

Es una voz clara e individual. Existe solo en nuestra intimidad.

Quién no la ha escuchado. Continuar leyendo

La vocación del enemigo

enemigoSi hay algo para lo que no trabajo, es para generarme enemigos.

Desisto del empeño en construirme esa suerte.

O mala suerte.

Vaya uno a saber.

Es que el potencial enemigo está agazapado. Al acecho.

Como si fuera alguien endiablado que se predispone a cometer justicia.

Cortarnos la cabeza. Continuar leyendo

Entre la verdad y la mentira

Abro la puerta y digo hola. No me sale la sonrisa.

Vuelvo a mi dormitorio. Me tiro en la cama y doy vueltas.

Cristina vino temprano otra vez y ya tendremos tiempo para arreglar las cuentas. Pienso.

Mientras ella comienza a hacer de las suyas yendo y viniendo por todo el departamento. Habilidad que le toma solo unos breves pasos. Con dos, llega al baño. Con cuatro, a la cocina.

Paso y medio, y está en el dormitorio.

Cristina me anda merodeando. Pienso. Continuar leyendo